Desde el cuarto de baño –con perdón- oí gritar esta expresión a una niña ó niño, dirigido a su madre ó abuela, quien se excusó con "no la pises, que se mueve", hacia otra persona. Esto muestra que cuando nacemos ya sabemos respetar a los demás seres que respiran, viven, como nosotros, pero no porque alguien nos hubiera dicho que los respetemos, sino, porque lo sentimos como parte de nuestra propia vida. Pero, al contrario, según crecemos, nos meten en la cabeza todo tipo de ideas, tendentes a asesinar y torturar, todo ser que se mueva, bajo mil y una excusa, por muy "lógica" ó absurda que nos parezcan esas ideas, parece "normal" el maltrato y el asesinato –con sus correspondientes interpretaciones, denotaciones y connotaciones de dichos términos-, incluida nuestra propia especie, que donde más ó donde menos, sobrevive "gracias" a eso que llaman "leyes" a las que hay que respetar para que no caigamos en esa tentación de matarnos los unos a los otros, no sólo por esas ideas colectivas, también por ideas propias venidas de la vanidad, la opulencia ó del egoísmo puro y duro.
Lo dicho; no matemos a la mariposa, ni siquiera si está muerta, pues, pisarla muerta supondría, no darle siquiera el respeto a un muerto.
El biciclante narrativo-reflexivo
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Publicado por el aprendiz para la martelo rompis la muron!! el 5/30/2008 08:13:00 PM
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